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Resolución 23: una política alternativa a la crisis

30 Noviembre, 2012
Fuente: 
PSI

El 29o Congreso Mundial de la Internacional de Servicios Públicos (ISP),
reunido en Durban del 27 al 30 de noviembre de 2012

OBSERVA que:

A raíz de la crisis económica hay un riesgo evidente de que los políticos tomen unas medidas de excesivo largo alcance que afecten a la política fiscal de los países, a la fijación de los salarios e inhiban el crecimiento. En un número creciente de países los políticos se están centrando de una manera demasiado limitada a la crisis de la deuda, que es una de las consecuencias de la crisis económica.

Un enfoque que se limita a la crisis de la deuda genera una política de moderación destinada a reducir la deuda nacional mediante recortes sociales y la degradación de los salarios y las condiciones de empleo de los empleados del sector público.

La crisis de la deuda no se debe a que el sector público sea demasiado grande o a que se invierta excesivamente en los servicios sociales, en el cuidado de los ancianos y de la infancia, en educación o en otros gastos similares. Tampoco se debe a que los salarios, las pensiones o las condiciones de empleo de los empleados del sector público sean excesivamente buenos. La crisis de la deuda es un resultado de la crisis económica y financiera, y un resultado del inmenso apoyo estatal que han recibido los bancos y las sociedades financieras.

OBSERVA asimismo que:

Es preciso que la atención deje de centrarse en la crisis de la deuda y pase a centrarse en el crecimiento sostenible, en una política actual y activa que pueda afrontar los desafíos que la crisis económica está presentando a las sociedades en estos momentos.

El sector público tiene la tarea más importante del mundo: ofrecer a los ciudadanos un alto nivel de bienestar social fiable y de calidad.

El sector público puede contrarrestar las fluctuaciones económicas mediante su función estabilizadora. Es por lo tanto de suma importancia mantener los empleos atractivos y rentables, y la inversión en el sector público.

OBSERVA asimismo que:

El alto nivel de bienestar social que proporcionan los servicios que prestan nuestros miembros, tanto a los ciudadanos como a las empresas, es en muchos sentidos una condición previa para otro tipo de desarrollo y producción social. Se puede ver que un bienestar social básico debe funcionar con el fin de ofrecer a la sociedad y a la comunidad empresarial una estructura sólida para el futuro. Una política de moderación, con unos recortes drásticos en el sector público y en los servicios sociales, no es la respuesta a una crisis económica, sino que solo contribuye a una espiral descendente de aumento del desempleo, de crecientes diferencias sociales y de injusticia.

Una alternativa a una política de moderación es invertir en el sector de los servicios sociales, en infraestructuras, en educación e investigación y en los lugares de trabajo. Se puede ver esta alternativa en otros lugares del mundo, como por ejemplo en Brasil, Sudáfrica y Australia. El resultado en estos países no es negativo o un crecimiento lento, sino que se crea más empleo, hay menos diferencias e injusticias, menos pobreza y mejores servicios de bienestar social.

OBSERVA asimismo que:

Reviste la mayor importancia que el derecho soberano de los países de controlar el desarrollo económico mediante el aumento de las inversiones, la reducción de las diferencias salariales y una seguridad social más ambiciosa esté reconocido, ya que estos factores funcionan como estabilizadores automáticos en tiempos de recesión económica y estabilizan las fluctuaciones cíclicas.

Las sociedades con democracia, seguridad jurídica y un nivel de protección social elevado están mejor preparadas en tiempos de crisis. Para que dichas sociedades puedan seguir desarrollándose, es necesario que las empresas, las instituciones y las personas que proporcionan servicios sociales puedan hacerlo contando con un alto nivel de confianza pública. Los ciudadanos tienen derecho a esperar un nivel alto de competencia y eficacia, y una ausencia de corrupción en los servicios y la asistencia social. Esto a su vez requiere que las prestaciones sociales sean suministradas por proveedores competentes que ofrezcan buenos salarios, empleos seguros y buenas condiciones de empleo.

OBSERVA asimismo que:

Se necesitan recursos para contrarrestar el desempleo en los periodos de recesión. Actualmente, pocos políticos se atreven a abstenerse de actuar cuando una crisis importante resulta evidente. Es común recurrir a la reducción de la presión fiscal, a pesar de que el arma más eficaz tanto contra el desempleo como contra la ralentización de la economía es incrementar el gasto público y la inversión.

El movimiento sindical debe apoyar a sus miembros en el sector público y las actividades que desarrollan para que la fijación de los salarios, el derecho de asociación y el derecho de huelga no sean socavados durante la gestión de una crisis. En tanto que organización sindical que representa a los empleados del sector público, debemos unirnos a diversas partes para formular una política económica alternativa destinada a la consecución de un crecimiento sostenible.

A corto plazo, esto significa elaborar una política activa destinada a la creación de nuevos y mejores empleos, medidas especiales para luchar contra el desempleo juvenil, mejores cualificaciones como una alternativa a los bajos salarios y unos servicios sociales de gran calidad. Todo ello debe realizarse mediante una inversión en infraestructuras, en educación e investigación, y en empleos verdes. Una reorientación ecológica de la producción y una energía verde no solamente permitirán que la economía progrese rápidamente, sino que también crearán nuevas posibilidades de crecimiento a largo plazo.

A largo plazo, debemos abordar los desafíos estructurales. Las finanzas públicas deben fundamentarse en una financiación basada en la solidaridad y una distribución equitativa. Queremos una imposición justa que sea capaz de garantizar unas finanzas públicas apropiadas (adecuadas). Se trata de asegurar una sociedad sostenible con unos sistemas de protección social y pensiones que permitan la subsistencia de todas las personas. Hacen falta medidas sostenibles contra la pobreza y las desigualdades. Debemos acabar con el poder de los mercados financieros, por ejemplo dividiendo los grandes bancos y compañías financieras, introduciendo impuestos sobre las transacciones financieras y desplazando el capital de la especulación a la inversión en innovación, empleos verdes y servicios de asistencia social.

EXHORTA A LA ISP A:

Fortalecer sus conocimientos y aptitudes en materia de política económica, contribuir en el debate económico a nivel mundial, formular alternativas claras y desarrollar herramientas destinadas a facilitar la participación y contribución de los sindicatos nacionales en el debate en materia de política económica.

Formar redes con la ISP para incrementar sus esfuerzos.

EXHORTA A LAS AFILIADAS A:

  • Esforzarse por alejarse de la tendencia política que resuelve las fluctuaciones económicas mediante ahorros/restricciones en el sector público, a fin de avanzar hacia un desarrollo del crecimiento y un incremento de la demanda de los servicios del sector público.
  • Respaldar las inversiones importantes y a largo plazo en infraestructuras de escuelas infantiles/de preescolar, escuelas, edificios públicos, carreteras y ferrocarriles.
  • Respaldar la introducción de un impuesto mundial sobre las transacciones financieras.

 

Véase todas las Resoluciones del Congreso así como el Programa de Acción y los Estatutos.

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