Salud para todos: continuar la campaña
07 Junio 2017
Unos días más tarde, las afiliadas de la ISP de todo el mundo se manifestaron en defensa del derecho al agua, que por supuesto es crucial para lograr la asistencia en salud pública universal.
El papel fundamental del derecho a la salud también fue resaltado por el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, que lo describió como un “derecho catalizador” para la realización de los demás derechos humanos. Las afiliadas de la ISP aprovecharon el 7 de abril, Día Mundial de la Salud en países de todo el mundo, para exigir a los estados acciones concretas encaminadas a garantizar la salud para todos. El tema del Día Mundial de la Salud de 2017 era la importante cuestión de la salud mental, con referencias concretas a la campaña de la Organización Mundial de la Salud: “Hablemos”.
También en abril, la OIT organizó una reunión tripartita muy fructífera sobre la mejora del empleo y las condiciones de trabajo en el ámbito de los servicios de salud. Era la primera vez que se celebraba una reunión de este tipo en casi 30 años. Los diferentes actores sociales coincidieron en que es imposible lograr la cobertura de salud universal sin ninguna acción que mejore el número de los trabajadores del sector de la salud y su combinación de competencias, en un contexto de trabajo digno.
La lucha por consagrar la salud para todos requiere que concertemos nuestros esfuerzos y atañe a todo el mundo. La última epidemia de Ébola en África Occidental solo es una muestra de cómo las macabras ramificaciones de los desafíos en el ámbito de salud pueden propagarse más allá de donde emergieron por la debilidad y la fragilidad de los sistemas. Queremos creer que se extrajeron las lecciones pertinentes de aquella experiencia para que los responsables políticos de todo el planeta se apresuren a atajar el brote fatal de Ébola detectado recientemente en la República Democrática del Congo.
Los responsables políticos al nivel de gobierno nacional, regional e internacional tienen un papel que desempeñar. La ISP y sus afiliadas seguirán luchando por influir en la política de los procesos de toma de decisiones y en los mecanismos de salud pública.
La salud es una cuestión sumamente política. El mundo tiene suficientes recursos para garantizar una atención de salud de calidad para cada mujer, hombre y niño de este planeta y para salvaguardar también la salud de la Tierra. El motivo por el que tantísima gente no puede acceder a unos servicios de salud y a una vida mejor es que la riqueza se concentra en manos de unos pocos, mientras que la miseria es la realidad generalizada de miles de millones de personas. Y en relación a esto, las políticas articuladas exclusivamente en torno al lucro, como la privatización en sus diferentes formas, hacen que a los pobres les sea imposible acceder a una atención de salud de calidad.
Otro mundo es posible. Un mundo mejor donde todos disfruten de unos servicios públicos de salud de calidad. Alcanzar este mundo también es una cuestión política. Los sindicatos, las organizaciones de la sociedad civil, las asociaciones comunitarias y cualquier persona bienintencionada deben hacer frente y sumarse a la lucha por la asistencia médica universal, incluida la redistribución de la riqueza para financiarla. La ISP y sus afiliadas, con sus más de 20 millones de mujeres y hombres suscritos, seguirán haciendo campaña por estos objetivos con nuestras hermanas y hermanos del movimiento de la sociedad civil.
Unidos y determinados, ganaremos.
Rosa Pavanelli,
Secretaria General de la ISP