El Acuerdo sobre el Comercio Internacional de Servicios (TISA); el Tratado Trans-Pacífico (TPP); la Alianza Transatlántica de Comercio e Inversión (TTIP); y el Acuerdo Integral de Economía y Comercio – Unión Europea-Canadá (CETA) son amenazas profundas a los servicios públicos.
Activarán más liberalización y que sea aún más difícil para los gobiernos regular las empresas privadas que prestan servicios públicos. Estos acuerdos pueden hacer que sea imposible un cambio en la política y van a evitar que los futuros gobiernos reviertan las privatizaciones anteriores. Estos acuerdos tan solo incrementarán el paisaje actual de aumento de la desigualdad de ingresos, el estancamiento y la disminución de los salarios y los altísimos déficits comerciales que afectan negativamente el crecimiento económico. Esta es la situación que enfrentan las economías pequeñas, medianas y grandes en toda la región.